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«El Comunismo de Marx como una Asociación de Individuos Libres: Una Revisión»: Seongjin Jeong
La idea de comunismo desarrollada por Marx es usualmente considerada como la erradicación de la propiedad privada y la creación de una economía planificada o estatización[1][2][3]. Sin embargo, en gran parte de su vida, Marx describió a la sociedad comunista como una asociación de individuos libres (en adelante, AIL). Pese a ello, los discursos que se refieren al comunismo rara vez han puesto atención a los aspectos de esta idea de AIL desarrollada por Marx. En efecto, la edición japonesa de las obras completas de Marx y Engels (Marx-Engels-Werke) traduce el concepto marxiano de asociación en más de veinte diferentes palabras[4]. Estudiando los textos de Marx que se refieren a la futura sociedad y basándome en trabajos recientes realizados en Japón sobre el concepto de AIL en Marx[5], me centraré en tres aspectos del comunismo tal como fueron desarrollados por Marx, a saber, libertad, individualidad y asociación. A su vez, pondré énfasis en la naturaleza concreta y no-utópica de la AIL, mostrando que los brotes de esta idea ya emergen desde el mismo modo de producción capitalista. Finalmente, sostendré que reducir la AIL de Marx a una suerte de modelo planificado del cálculo del tiempo de trabajo (labor-time calculation planning model) contradice la idea original de la AIL en tanto en cuanto un modelo abierto (open-model), uno que avanza hacia la abolición del trabajo en el comunismo desarrollado. Leer más…
“Intersección, articulación: el álgebra feminista”: Jonathan Martineau
Introducción de la Revue Période:
Dos importantes innovaciones teóricas han marcado recientemente el feminismo marxista a escala internacional. Por una parte, la renovación del feminismo de la reproducción social. Por la otra, el redescubrimiento por parte de las feministas antirracistas de la metodología socio-histórica de E. P. Thompson, según la cual la experiencia colectiva es la unidad de todos los momentos de la vida social. Jonathan Martineau toma estos conceptos para profundizar en la idea de una teoría feminista unitaria. Contra toda tentativa de cosificar las opresiones, de separar patriarcado y capitalismo en sistemas distintos o de subestimar la importancia de la cuestión racial, Martineau muestra que es posible pensar una teoría feminista donde el capitalismo produce diferenciaciones tanto de género como de raza.
Agradecemos a Jonathan Martineau y a los amigos de Période por su amabilidad y la autorización para la publicación íntegra de la presente traducción.
Este artículo pretende presentar algunas innovaciones y reflexiones teóricas aparecidas en lengua inglesa que han intentado repensar las categorías marxistas respecto a la cuestión de la raza y la problemática de las relaciones de género. Los trabajos de autoras anglófonas asociadas a las teorías de la interseccionalidad han sido ampliamente debatidos en el mundo francófono. En cambio, no han recibido la misma atención ciertas autoras que han abordado las cuestiones de la opresión de género y el racismo en continuidad con la teoría marxista al margen de las teorías de la interseccionalidad. La mayoría de ellas no han sido traducidas al francés. Parece pertinente trazar los contornos de dichas contribuciones, con el objetivo de promover el diálogo con las corrientes feministas materialistas francófonas, que si bien han continuado innovando notablemente en el plano teórico, lo han hecho en menor medida en relación con la herencia teórica marxista. Más concretamente, este texto tiene por objetivo presentar las contribuciones de las sociólogas Lise Vogel y Himani Bannerji, así como los elementos del contexto intelectual en el que han intervenido. Estas autoras han preparado el terreno para una apertura del marxismo a las problemáticas de género y de raza. La escuela de la teoría de la reproducción social, que a su vez goza de un impulso importante en los últimos 10 a 15 años especialmente en Canadá, se ha hecho eco de estos trabajos. Para precisar sus propuestas y sus puntos de apoyo teóricos, se propone un breve repaso sobre la articulación de la cuestión de la opresión de género en la teoría marxista. Leer más…
«Capital, fuerza de trabajo y relaciones de género»: Susan Ferguson, David McNally
Introducción a la edición de Historical Materialism de «El marxismo y la opresión de las mujeres. Hacia una teoría unificada». Marxism and the Oppression of Women. Toward a Unitary Theory. Lise Vogel (2013). Chicago: Haymarket Books.
Agradecemos a los amigos de Historical Materialism la amable autorización para la publicación íntegra de la presente traducción.
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La vida de los libros es curiosa. Mientras algunos se elevan a las cumbres del éxito sobre una ola de aclamación pública, otros rápidamente se sumergen en la oscuridad. También están aquéllos que desarrollan una larga existencia subterránea, sobreviviendo gracias a los esfuerzos de pequeños grupos de devotos seguidores que divulgan la palabra desafiando el muro del silencio. Ésta última es la historia del libro de Lise Vogel «El marxismo y la opresión de las mujeres. Hacia una teoría unificada». Publicado por primera vez en 1983, el trabajo de Vogel apareció en un momento de agudo desconcierto en el movimiento feminista socialista, precisamente las coordenadas en las que el libro se había gestado. Tambaleándose bajo los golpes de martillo del neoliberalismo en el ámbito político y la teoría posmoderna en el plano intelectual, y profundamente desorientado por el repliegue de la clase trabajadora, el socialismo y el movimiento de mujeres, el feminismo socialista se aferró desesperadamente a una existencia marginal en los bordes de la vida política e intelectual. Una década antes, un libro como el de Vogel habría sido un pararrayos atractor de enérgicas discusiones y debates. A mediados los años ochenta, sin embargo, apenas fue detectado por el radar cultural. Leer más…
«Once tesis sobre socialismo y democracia»: Adolfo Sánchez Vázquez
El problema de y las discusiones sobre las relaciones entre socialismo y democracia, tan vivos en estos últimos años, distan mucho de ser una novedad, sobre todo para los marxistas. Baste recordar los famosos debates entre Rosa Luxemburgo y Kautsky al comenzar el presente siglo, así como los enfrentamientos, desde diversos ángulos, de Rosa Luxemburgo y Kautsky con Lenin. La crispación de esos debates, particularmente el segundo, puede apreciarse claramente desde el título mismo del texto polémico de Lenin La revolución proletaria y el renegado Kautsky. Al abordarse en esos debates las relaciones entre socialismo y democracia, en el fondo se trataba de concepciones diametralmente opuestas sobre el significado de la teoría de Marx, sobre la idea del socialismo y sobre la estrategia de la socialdemocracia y del bolchevismo en su opción práctica por el socialismo. No nos detendremos en el saldo que arrojaron dichas polémicas. Simplemente las recordaremos por un momento para subrayar cómo estaba presente en ellas, desde perspectivas opuestas, la necesidad de poner en relación —y en una relación insoslayable— socialismo y democracia.
En las décadas posteriores la II Internacional, socialista, se aferra a una concepción de la democracia que excluye la revolución, en tanto que la III Internacional, comunista, hace lo propio con una concepción de inspiración leninista de la “actualidad de la revolución”, según la expresión lukacsiana de los años veinte. Esta concepción deja de lado la preocupación por la democracia tanto en la conquista como en el mantenimiento del poder hasta que, mediada la década de los treinta, vuelve a ponerse sobre el tapete en el VII Congreso de la Internacional Comunista con una concepción instrumental —la del Frente Popular— de la democracia. Leer más…
«Notas sobre Lenin y el arte»: Adolfo Sánchez Vázquez
«Informe 11: La desposesión de la vida cotidiana»: Seminario de economía crítica Taifa
Se encuentran abundantes análisis de coyuntura sobre la evolución socio-económica –¿se sale o no de la crisis?–, pero no nos parece que se le preste suficiente atención a los elementos estructurales del sistema y cómo estos afectan a la ciudadanía, especialmente a los grupos más vulnerables. Por ello, en este informe, nos proponemos explorar las líneas principales de la evolución del sistema económico en la segunda década del siglo XXI en sus elementos estructurales y, principalmente, las consecuencias en la vida de la ciudadanía de a pie respecto a cómo se está produciendo esta desposesión/reestructuración. La idea es intentar entender de qué manera la vida cotidiana es afectada por el conjunto de relaciones reales de producción, legales, políticas e ideológicas que configuran la esencia del capitalismo en general y más concretamente en su fase actual de “restauración” después de una gran crisis. Leer más…
«Antonio Gramsci para principiantes»: Néstor Kohan
Documental ilustrado por Canal Encuentro de Argentina sobre el libro “GRAMSCI PARA PRINCIPIANTES” de Néstor Kohan e ilustraciones de Miguel Rep. Biografía política del marxista revolucionario italiano y principal pensador comunista. Síntesis de sus CUADERNOS DE LA CÁRCEL El poder y la revolución como ejes del marxismo. La lucha por la hegemonía socialista y las relaciones de fuerza en la lucha de clases sociales. La herencia política y cultural de Lenin y las enseñanzas de Marx contra el mercado capitalista y en defensa del comunismo. Gramsci analizado desde América Latina y a contracorriente de la socialdemocracia, el posmarxismo y el neoliberalismo. Leer más…
«Introducción a Raymond Williams. Complejidad, inmanencia y la larga revolución en Raimond Williams»: Daniel Hartley
Raymond Williams es de sobra conocido como precursor de los estudios culturales, es decir, como un marxista preocupado por las cuestiones culturales cuyos trabajos parecen haber (mal) envejecido. Si el conocimiento de este autor se queda tan a menudo aquí, Daniel Hartley propone, al contrario, redescubrir a Williams como un marxista particularmente innovador, cuyas penetraciones teóricas siguen siendo de actualidad. En este texto, Hartley esclarece tres conceptos de Williams que hacen de él un autor decisivo para hoy: la complejidad, la inmanencia y la larga revolución. Al confrontar a Williams con la crítica althuseriana de su tiempo (Terry Eagleton), Hartley lo presenta como un pensador de las densidades materiales, culturales y económicas que dan a la tradición socialista una dimensión trágica, es decir, en puridad, estratégica.
Con algunas excepciones más o menos1, la obra de Raymond Williams no ha sido siempre abordada con el rigor sistemático que merece2. El presente artículo trata, modestamente, de contrarrestar esta tendencia pensando en la unidad que las diversas lecturas parciales de Williams han perdido de vista. Si este intento corre el riesgo de parcialidad “sincrónica” o – por retomar la expresión de Williams – “epocal”3, es sin embargo necesario si queremos asegurar la visión de conjunto del trabajo de toda su vida. Hacerlo así es importante tanto para nuestra comprensión del proyecto político global de Williams, como para nuestra capacidad de pensar e intervenir en la compleja totalidad de nuestro propio presente histórico. En otras palabras, la actualidad de Williams tiene hoy como condición, en mi opinión, la reconstitución de la totalidad de su obra. Esta totalidad puede expresarse en dos máximas, en apariencia banales, pero que creo son determinantes en todos los niveles de su obra:
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El mundo es más complejo de lo que pensamos (la máxima de complejidad)
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Estamos dentro de él (máxima de inmanencia)
«Dialéctica de lo ideal (Iliénkov)»: Rubén Zardoza

«Évald Iliénkov: el último Marxista Soviético»: Alexei Tsvetkov
En un artículo para The Prime Russian Maganize (en su edición sobre el Marxismo), el poeta Alexei Tsvetkov escribió este retrato de Évald Iliénkov, el último Marxista Soviético y una de los más grandes y originales pensadores de la Unión Soviética. Tsvetkov nos ofrece un retrato de una figura realmente única cuyas obras merecen ser releídas y traducidas, pero también un retrato poco habitual de los tiempos y la atmósfera en la que vivió.
Sobre el último Marxista Soviético.
Al comienzo del conflicto armado entre China y Vietnam aullaba contra su radio negándose a hablar con nadie. Sartre bien podría haber escrito una novela o Godard haber rodado una película sobre él. Alexei Tsvetkov escribe sobre el último Marxista Soviético, Évald Iliénkov. Leer más…
«Adolfo Sánchez Vázquez, la crítica de la metafísica y la ética comunista»: Néstor Kohan
«Adolfo Sánchez Vázquez (1915 – 2011)»: Gabriel Vargas Lozano

«El marxismo y la justicia social. La idea de igualdad en Ernesto Che Guevara»: Fernando Lizárraga
Profundo análisis de Fernando Lizarraga (investigador del Conicet e integrante del CIPEC) quien en esta obra pone a discutir al Che Guevara con lo más selecto del pensamiento académico anglosajón contemporáneo centrado en la noción normativa de justicia. Leer más…
«Sobre el sujeto de la Historia» Adolfo Sánchez Vázquez

«Cuentos de brujas»: Entrevista a Silvia Federici por Verónica Gago
En su libro Calibán y la Bruja. Mujeres, cuerpo y acumulación originaria (Tinta Limón Ediciones, 2011), la feminista italiana Silvia Federici retoma la matanza de brujas como fundante de un sistema capitalista que domestica a las mujeres, imponiéndoles la reproducción de la fuerza de trabajo como un trabajo forzado y sin remuneración alguna. Es en el modo en que se desarrolla ese trabajo reproductivo donde Federici considera que hay un campo de lucha central para el movimiento de mujeres.
Esta no es una historia de hadas sino de puras brujas. Que, a su vez, se desdoblan en otros personajes, también femeninos y cercanos: la hereje, la curandera, la partera, la esposa desobediente, la mujer que se anima a vivir sola, la mujer obeah (practicante de magia secreta) que envenenaba la comida del amo e inspiraba a los esclavos a rebelarse. El capitalismo, desde sus orígenes, persigue y combate a estas mujeres con saña y terror. La feminista italiana Silvia Federici, en su libro Calibán y la Bruja. Mujeres, cuerpo y acumulación originaria (Tinta Limón Ediciones), se hace preguntas fundamentales sobre esa figura emblemática de lo femenino: ¿por qué el capitalismo, desde su fundación, necesita hacerles la guerra a esas mujeres? ¿Por qué la caza de brujas es una de las matanzas más brutales y menos recordadas de la historia? ¿Qué se quería eliminar cuando se las condenaba a la hoguera? ¿Por qué puede trazarse un paralelo entre ellas y las esclavas negras de las plantaciones en América?
Silvia Federici nació en Italia, pero vive en Estados Unidos desde los años ’60. Allí desarrolló su militancia feminista y su colaboración con el movimiento negro. Fue fundadora de la Red Internacional por el Salario Doméstico. Vivió y enseñó en Nigeria durante los ’80, donde también realizó un trabajo con organizaciones de mujeres y contra las políticas de ajuste estructural que se ensayaban entonces sobre Africa. Leer más…