Archivo

Posts Tagged ‘Materialismo Histórico’

«Introducción a Costumbres en común de E. P. Thompson»: Julio Martínez-Cava Aguilar

15/07/2019 1 comentario

Reproducimos a continuación la introducción a la reedición de E. P. Thompson – Costumbres en común. Estudios sobre la cultura popular (Madrid: Capitán Swing, 2019).

Agradecemos al autor y a la editorial la amable autorización para la publicación íntegra de la presente introducción.

Leer más…

«Marx, la historia y los historiadores Una relación para reinventar»: Enzo Traverso

26/11/2018 Deja un comentario

Marx no «ha vuelto» en el mundo de la historia y los historiadores. La «posmodernidad» no parece suficiente para explicar el retroceso del marxismo en la historiografía. Este se debe más bien a causas políticas, al peso de una derrota más general del socialismo sobre una corriente con concepciones teleológicas y totalizadoras de la historia. Si las luchas del presente se alimentan del recuerdo de los combates perdidos, hay ahí una vía para recuperar un marxismo capaz de descifrar el pasado con menos certezas, pero más atención a las acciones y los combates humanos.*

El «retorno a Marx» iniciado en los últimos años –muy visible en lo que suele llamarse el nuevo pensamiento crítico– no alcanzó a la historia. Para la mayoría de los jóvenes historiadores, Marx constituye una suerte de terra incognita; para los mayores, una figura olvidada, cuando no proscripta. Desde luego, muchos historiadores marxistas siguen siendo activos y prolíficos, sobre todo en el mundo anglófono, pero la historiografía en su conjunto aún no ha dado vuelta la página de la «crisis del marxismo». Eric Hobsbawm, uno de los más célebres historiadores marxistas, observaba este fenómeno con lucidez: «Los 25 años siguientes al centenario de la muerte de Marx fueron los más oscuros en la historia de su legado»1. En Francia, Thierry Aprile trazaba un cuadro más sombrío. En su reconstrucción de la trayectoria del marxismo en la historiografía, señaló, ante todo, su reconocimiento, que comenzó en la década de 1930 y que continuó tras la Segunda Guerra Mundial –sobre todo, gracias a la Escuela de los Annales, con su entrada, todavía tímida, en el campo universitario–, luego su hegemonía –Aprile no duda en hablar de «dominio»–, que se establece en las décadas de 1960 y 1970, cuando acompaña el auge del estructuralismo, antes de comenzar, a partir de mediados de los años 70, un ocaso que lo llevaría, finalmente, a desaparecer a lo largo de la década siguiente, con su deceso simbolizado por el giro de 1989. Se inicia entonces un periodo durante el cual, según Aprile, «incluso la referencia al marxismo podría significar descalificación»2.     Leer más…

“C.L.R. James: hacia un materialismo postcolonial”: Matthieu Renault

05/03/2018 Deja un comentario

La crítica del eurocentrismo debe renovarse. Para algunos, aplicar los conceptos del marxismo más allá de las fronteras de Europa es condición suficiente para revisar el vínculo europeo de la teoría social. Para otros, provincializar Europa requiere una renuncia a toda conceptualización unitaria del capitalismo y de los conflictos que se producen en su seno. Matthieu Renault propone cambiar los términos del debate insistiendo en la originalidad y la importancia del trabajo teórico de C.L.R. James. El marxista caribeño ofrece una clave esencial de la crítica del eurocentrismo que Matthieu Renault pretende examinar bajo el prisma de las nociones de civilización y traducción.

1) De la crítica postcolonial… al marxismo anticolonial.

“C.L.R. James era trotskista, y fue marxista toda su vida. No hubiera podido contener la risa si le hubiesen presentado un texto de los teóricos postcoloniales recientes diciéndole: “mira, estos son tus hijos”. Sufriría un ataque de risa.”[1]

Estas palabras son un fragmento de la entrevista con Vivek Chibber, autor de Postcolonial Theory and the Specter of Capital, obra publicada en 2013[2]. Estas líneas prolongan los argumentos desarrollados en la conclusión de su obra en la que el autor se opone con vigor a la tesis planteada por Robert J.C. Young en Postcolonialism: An Historical Introduction (2001). Young plantea que, sin importar que operen en condiciones marcadamente diferentes de las existentes en situación colonial, la crítica postcolonial “se inspira” e “incorpora la herencia de las tradiciones marxistas sincréticas desarrolladas fuera de occidente durante las luchas anticoloniales”[3]. Dicho de otro modo, para Young, la crítica postcolonial es heredera directa del anticolonialismo, y más particularmente de los marxismos anticoloniales. Pero, según Chibber, “la descripción de Young es totalmente errónea”. ¿Por qué? Porque las grandes figuras del anticolonialismo, de Kwame Nkrumah a Amílcar Cabral, pasando por C.L.R. James, fueron fieles al “pensamiento humanista y la ética universal”. Independientemente de las derivas y desventuras de los regímenes postcoloniales, añade Chibber, los teóricos y dirigentes anticoloniales –a menudo fueron lo uno y lo otro– confiaban en la ciencia, la objetividad y la idea de “emancipación universal”, ideas que por el contrario constituyen el “blanco privilegiado de las críticas” del campo de estudios postcoloniales[4]. Leer más…

«Lenin en 2017, ¿en serio?»: Jorge Lago, Jorge Moruno

29/11/2017 Deja un comentario

¿Qué puede decirnos hoy la revolución de 1917? La izquierda y los liberales coinciden en su comprensión de la revolución rusa pues le dan el mismo sentido aunque desde perspectivas distintas, confundiéndose la reivindicación melancólica de los primeros con la caricatura que hacen los segundos: Lenin embalsamado. Si hoy seguimos hablando de la democracia griega es por el sentido político que nos ha legado y no tanto por su sola dimensión histórica o, dicho de otra forma, lo que interesa es el campo y horizonte que abre y no tanto el modo concreto de su aplicación, donde mujeres y esclavos quedaban, por ejemplo, al margen. Con la revolución rusa ocurre algo similar: si bien resulta imposible explicar y comprender el siglo XX sin su existencia, su legado político nada tiene que ver con los retos concretos y las soluciones que aplicaron sus actores, sino más bien con las motivaciones, las dudas, las contradicciones y el espíritu o el gesto revolucionario que consiguieron desplegar.

¿Las contradicciones que tuvieron que afrontar sus protagonistas permiten sacar alguna conclusión o lección sobre los desafíos del presente? Sí, pero no porque la revolución rusa sirva como ejemplo de conflictos afrontados y resueltos, sino precisamente por lo contrario, porque sigue mostrando escollos con los que podemos toparnos una y otra vez, y que ilustran los callejones sin salida a los que puede conducir todo proceso de cambio político. Nuestra intención aquí no pasa por juzgar, hacer revisionismo histórico o justicia con la historia, sino reconocer esos lugares de fricción o contradicción, y tomarlos como lecciones presentes para afrontar el cambio político por venir. Si es que viene. Veamos algunas cuestiones:   Leer más…

«Raya Dunayevskaya: Un marxismo de la liberación»: Frédéric Monferrand

08/09/2017 Deja un comentario

Marxismo y libertad de Raya Dunayevskaya representa una de las grandes tentativas llevadas a cabo en la segunda mitad del siglo XX por mantener abierto el horizonte de la emancipación contra la esclerosis estalinista del movimiento obrero internacional. En el presente prólogo a la reedición francesa (Ed. Syllepse), Frédéric Monferrand revisa el diagnóstico histórico así como la interpretación de la obra de Marx propuesta por Dunayevskaya. De la teoría del “capitalismo de Estado” a la “filosofía de la liberación” se dibuja una exigencia de “revolución permanente” de los movimientos sociales que merece ser explorada de nuevo en el momento actual en que la “convergencia de luchas” es más deseada que teorizada y hecha realidad.

El marxismo es una teoría de la liberación o no es nada (Raya Dunayevskaya) Leer más…

“Intersección, articulación: el álgebra feminista”: Jonathan Martineau

17/02/2017 Deja un comentario

2-mother-earth-aIntroducción de la Revue Période:

Dos importantes innovaciones teóricas han marcado recientemente el feminismo marxista a escala internacional. Por una parte, la renovación del feminismo de la reproducción social. Por la otra, el redescubrimiento por parte de las feministas antirracistas de la metodología socio-histórica de E. P. Thompson, según la cual la experiencia colectiva es la unidad de todos los momentos de la vida social. Jonathan Martineau toma estos conceptos para profundizar en la idea de una teoría feminista unitaria. Contra toda tentativa de cosificar las opresiones, de separar patriarcado y capitalismo en sistemas distintos o de subestimar la importancia de la cuestión racial, Martineau muestra que es posible pensar una teoría feminista donde el capitalismo produce diferenciaciones tanto de género como de raza.

Agradecemos a Jonathan Martineau y a los amigos de Période por su amabilidad y la autorización para la publicación íntegra de la presente traducción.


Este artículo pretende presentar algunas innovaciones y reflexiones teóricas aparecidas en lengua inglesa que han intentado repensar las categorías marxistas respecto a la cuestión de la raza y la problemática de las relaciones de género. Los trabajos de autoras anglófonas asociadas a las teorías de la interseccionalidad han sido ampliamente debatidos en el mundo francófono. En cambio, no han recibido la misma atención ciertas autoras que han abordado las cuestiones de la opresión de género y el racismo en continuidad con la teoría marxista al margen de las teorías de la interseccionalidad. La mayoría de ellas no han sido traducidas al francés. Parece pertinente trazar los contornos de dichas contribuciones, con el objetivo de promover el diálogo con las corrientes feministas materialistas francófonas, que si bien han continuado innovando notablemente en el plano teórico, lo han hecho en menor medida en relación con la herencia teórica marxista. Más concretamente, este texto tiene por objetivo presentar las contribuciones de las sociólogas Lise Vogel y Himani Bannerji, así como los elementos del contexto intelectual en el que han intervenido. Estas autoras han preparado el terreno para una apertura del marxismo a las problemáticas de género y de raza. La escuela de la teoría de la reproducción social, que a su vez goza de un impulso importante en los últimos 10 a 15 años especialmente en Canadá, se ha hecho eco de estos trabajos. Para precisar sus propuestas y sus puntos de apoyo teóricos, se propone un breve repaso sobre la articulación de la cuestión de la opresión de género en la teoría marxista. Leer más…

“La izquierda es una historia de derrotas”: Enzo Traverso

17/02/2017 Deja un comentario

5052765_7_68f4_enzo-traverso-2016_17c947a87ce33cc2af6908c008291b9fLa renovación no vendrá del Partido Socialista, según el historiador de las ideas Enzo Traverso. Para reinventarse, la izquierda debe sacar fuerzas de una de sus dimensiones fundamentales: la energía de la melancolía. Las nuevas derechas que, ellas sí, saben ganar, evolucionan hacia un movimiento “post-fascista”. ¿Como Trump?

Uno tras otro, Enzo Traverso, publica dos libros que él mismo considera partes de un díptico. En Les nouveaux visages du fascisme (de próxima aparición, Ed. Textuel), el historiador de las ideas define el concepto de “post-fascismo” para revelar la naturaleza cambiante de las nuevas corrientes populistas y xenófobas, de Trump a Le Pen. En Mélancolie de gauche, la force d’une tradition cachée (publicado en noviembre, Ed. La Découverte), Traverso explica porqué la izquierda debería sacar fuerzas de su melancolía inherente, una fuerza para reinventarse. Nacido en Italia, ex-universitario francés, antiguo militante de extrema izquierda, hoy profesor en la Universidad de Cornell en los Estados Unidos, Enzo Traverso sitúa las pasiones políticas francesas -de la reconstrucción de la izquierda a la tentación populista- en el corazón del debate internacional. Leer más…

«La actualidad del pensamiento político de Antonio Gramsci»: Jordi Mir, Joan Tafalla, Víctor Ríos

17/02/2017 Deja un comentario

Taller «La actualidad del pensamiento político de Antonio Gramsci» de la Escuela de Invierno de Izquierda Unida 2017 organizada por la FEC.

Intervienen:
· Marga Ferré – Presidenta de la FEC
· Jordi Mir – Universidad Pompeu Fabra
· Joan Tafalla – Espai Marx
· Víctor Ríos – Centro Estudios Movimientos Sociales de la UPF

Leer más…

«Capital, fuerza de trabajo y relaciones de género»: Susan Ferguson, David McNally

16/01/2017 1 comentario

9781608463404-f_medium-3e2457e2af211ce9a47d2c3ad6d15b75Introducción a la edición de Historical Materialism de «El marxismo y la opresión de las mujeres. Hacia una teoría unificada». Marxism and the Oppression of Women. Toward a Unitary Theory. Lise Vogel (2013). Chicago: Haymarket Books.

Agradecemos a los amigos de Historical Materialism la amable autorización para la publicación íntegra de la presente traducción.

____________________________________

La vida de los libros es curiosa. Mientras algunos se elevan a las cumbres del éxito sobre una ola de aclamación pública, otros rápidamente se sumergen en la oscuridad. También están aquéllos que desarrollan una larga existencia subterránea, sobreviviendo gracias a los esfuerzos de pequeños grupos de devotos seguidores que divulgan la palabra desafiando el muro del silencio. Ésta última es la historia del libro de Lise Vogel «El marxismo y la opresión de las mujeres. Hacia una teoría unificada». Publicado por primera vez en 1983, el trabajo de Vogel apareció en un momento de agudo desconcierto en el movimiento feminista socialista, precisamente las coordenadas en las que el libro se había gestado. Tambaleándose bajo los golpes de martillo del neoliberalismo en el ámbito político y la teoría posmoderna en el plano intelectual, y profundamente desorientado por el repliegue de la clase trabajadora, el socialismo y el movimiento de mujeres, el feminismo socialista se aferró desesperadamente a una existencia marginal en los bordes de la vida política e intelectual. Una década antes, un libro como el de Vogel habría sido un pararrayos atractor de enérgicas discusiones y debates. A mediados los años ochenta, sin embargo, apenas fue detectado por el radar cultural. Leer más…

«Ideal socialista y socialismo real»: Adolfo Sánchez Vázquez

16/01/2017 Deja un comentario

marx-streetart-1200-proNota introductoria de la Revista Nexos

Adolfo Sánchez Vázquez. Entre otras obras ha publicado Las ideas estéticas de Marx (Editorial ERA. 1965, con varias reediciones), una antología en dos volúmenes: Estética y marxismo (ERA), y Política y praxis (Ed. Grijalbo).

Ponencia presentada en el simpósium Internacional “Del socialismo existente al nuevo socialismo” organizado por el Movimiento al Socialismo (MAS) de Venezuela en Caracas del 27 al 31 de mayo de 1981. Las ideas fundamentales del presente texto fueron expuestas en el Seminario sobre “Los nuevos procesos sociales y la teoría política contemporánea” organizado por el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM en Oaxaca del 30 de marzo al 5 de abril de 1981.

El socialismo como ideal y como necesidad histórica

Cualesquiera que sean las formas que haya revestido históricamente el socialismo, siempre ha significado un modelo alternativo de sociedad y, por tanto, una meta a alcanzar o una aspiración a cumplir. Con ello queremos decir también que es un ideal y al decirlo no pasamos por alto lo que Marx y Engels declaran en La ideología alemana: “Para nosotros el comunismo no es un estado que debe implantarse, un ideal al que haya de sujetarse la realidad. Nosotros llamamos comunismo al movimiento real que anula y supera el estado de cosas actual”.[2] Este ideal que Marx y Engels rechazan es el que pretende sustentarse a sí mismo, independientemente de las condiciones necesarias para su realización: un ideal por ende que no requiere apoyarse en un conocimiento de la realidad que ha de ser anulada y superada ni del sujeto que ha de llevar a cabo esa transformación ni de los medios adecuados para llevarla a cabo. Como simple blanco de una aspiración, ese ideal es una utopía: no en el sentido platónico que hace superflua su realización, dadas su perfección y autosuficiencia, sino en el socialista utópico de una aspiración a realizar condenada a su irrealización. Ahora bien, para que el socialismo fuera una fuerza ideológica movilizadora “como meta del movimiento social” -meta que los socialistas utópicos “al criticar a la sociedad actual, describían claramente”,[3] se requería precisamente una crítica de su utopismo. Y tal es el paso que dieron Marx y Engels al contraponer al “ideal al que haya de ajustarse la realidad” el que surge de lo real mismo como posibilidad no realizada todavía pero realizable. Al socialismo ideal, utópico, no al ideal socialista, sucedió así el socialismo científico. Leer más…

«Lenin, lector de Hegel»: Stathis Kouvélakis

28/11/2016 Deja un comentario

leninLa Primera Guerra Mundial no fue simplemente una erupción de masacres a escala masiva en el corazón de los países imperialistas. Tras un siglo de relativa paz interna supuso, al mismo tiempo, el colapso de su oponente histórico, el movimiento obrero europeo organizado esencialmente en torno a la Segunda Internacional. El término «desastre» resulta adecuado, aunque Alain Badiou lo utiliza para referirse a la refutación final de una cierta forma de política emancipatoria, resultado del reciente colapso de los así llamados regímenes comunistas del Este europeo^ Si consideramos que este segundo desastre golpeó precisamente la verdad política que bajo el nombre de «Octubre de 1917», o igualmente de «Lenin», nació en respuesta al primero, entonces el mismo se convierte en el rizo final del «corto siglo XX», que se cerró con esta repetición del desastre. Paradójicamente, por lo tanto, no es un mal momento para volver al principio, el momento en que en medio del barro y la sangre que anegó Europa el verano de 1914, surgió este siglo. Leer más…

«Lenin: ¡saltos! ¡saltos! ¡saltos!»: Daniel Bensaïd

28/11/2016 1 comentario

daniel-bensac3afdUna política sin partidos termina, en la mayoría de los casos, en una política sin política: ya sea en un seguidismo sin objetivos a la espontaneidad de los movimientos sociales, o en la peor forma de vanguardismo individualista elitista, o finalmente en una represión de lo político en favor de lo estético o de lo ético.

A Hannah Arendt le angustiaba que la política pudiera desaparecer completamente del mundo. El siglo había atestiguado tales desastres que la pregunta de si acaso «la política todavía tiene significado alguno» se había vuelto inevitable. Los problemas que se debatían en estos miedos eran sumamente prácticos: «La falta de significado en el que el conjunto de la política ha terminado está confirmada por la vía muerta en la que se acumulan las cuestiones políticas específicas».[1]

Para ella, la forma que tomaba esta temida desaparición de la política era el totalitarismo. Hoy nos enfrentamos a una forma diferente de peligro: la tiranía del mercado. Aquí la política se encuentra aplastada entre el orden de los mercados financieros –que presentan como natural– y las prescripciones   moralizantes del capitalismo ventrílocuo. Leer más…

«Lenin en l’era postmoderna»: Terry Eagleton

28/11/2016 Deja un comentario

leninAllò que admira l’era postmoderna no és el leninisme. El que valora és una veritat que sigui corregible, provisional, inestable, en comptes de la possessió inalienable d’una avantguarda encimbellada autoritàriament per sobre del poble. No s’entusiasma amb la idea que els intel·lectuals de la classe mitjana estiguin aquí per dir a les masses treballadores el que han de fer, o per la perspectiva que el coneixement és una qüestió de veritats científiques eternes, en comptes del fruit de la pràctica històrica. S’alarma amb la perspectiva d’una cultura obedientment enganxada al carro de les finalitats del partit. Es mostra recelosa de les teleologies, de les èpoques històriques disposades de principi a fi com a fitxes de dòmino, i en comptes d’això es torna cap a un temps en circulació i intercalat, fracturat i de múltiples capes. És al·lèrgica a la puresa política i a les ruptures metafísiques, preferint l’híbrid i l’ambigu per sobre de la resplendor de la certesa absoluta. Es resisteix a les crues reduccions de l’economicisme. El seu model de poder preferit no està centralitzat sinó que és múltiple, escampat i omnipresent. Es mostra escèptica de polítiques específiques de classe, anhelant en comptes d’això una política oberta a les diferències ètniques i als condemnats de la terra.

En resum el que admira l’era postmoderna és… el leninisme. Perquè tot això també és autèntic leninisme.

Leer más…

«Learning from Late Marx»: Kohei Saito

31/10/2016 Deja un comentario
Kevin B. Anderson, Marx at the Margins: On Nationalism, Ethnicity and Non-Western Societies, expanded edition (Chicago: University of Chicago Press, 2016), 344 pages, $25, paperback.

Recent years have seen the development of a fresh area of research into Marx’s critique of political economy, based on his previously unpublished economic manuscripts and notebooks, which have been made newly available in the updated edition of the complete works of Marx and Engels, the Marx-Engels-Gesamtausgabe (MEGA).1 Lucia Pradella published the first detailed analysis in English of Marx’s London Notebooks, and Brill’s Historical Materialism book series recently celebrated its hundredth volume with a translation of Marx’s original manuscript for volume 3 of Capital, based on the new MEGA edition. The same series also published Heather Brown’s Marx on Gender, which drew extensively on his late notebooks.2 And earlier this year, the second, expanded edition of Kevin Anderson’s Marx at the Margins: On Nationalism, Ethnicity and Non-Western Societies appeared. The first edition of Anderson’s book, published in 2010, inaugurated this new trend in Marxist studies, and it remains among the most important achievements in the field. Leer más…

«Once tesis sobre socialismo y democracia»: Adolfo Sánchez Vázquez

31/10/2016 Deja un comentario

002El problema de y las discusiones sobre las relaciones entre socialismo y democracia, tan vivos en estos últimos años, distan mucho de ser una novedad, sobre todo para los marxistas. Baste recordar  los famosos debates  entre  Rosa Luxemburgo y Kautsky al  comenzar  el  presente siglo, así como los enfrentamientos, desde diversos ángulos, de Rosa Luxemburgo y Kautsky con  Lenin.  La  crispación  de  esos  debates,  particularmente  el  segundo,  puede  apreciarse claramente desde el título mismo del texto polémico de Lenin La revolución proletaria y el renegado Kautsky. Al abordarse en esos debates las relaciones entre socialismo y democracia, en el  fondo se trataba de concepciones diametralmente opuestas sobre el  significado de la teoría de Marx, sobre la idea del socialismo y sobre la estrategia de la socialdemocracia y del bolchevismo en su opción práctica por el  socialismo. No nos detendremos en el saldo que arrojaron dichas polémicas.  Simplemente las recordaremos por un momento para subrayar cómo estaba presente en ellas, desde perspectivas opuestas, la necesidad de poner en relación —y en una relación insoslayable— socialismo y democracia.

En las décadas posteriores la II Internacional, socialista, se aferra a una concepción de la democracia que excluye la revolución, en tanto que la III Internacional,  comunista,  hace lo propio con una concepción de inspiración leninista de la “actualidad de la revolución”, según la expresión lukacsiana de los años veinte. Esta concepción deja de lado la preocupación por la democracia tanto en la conquista como en el mantenimiento del poder hasta que, mediada la  década  de  los  treinta,  vuelve  a  ponerse  sobre  el  tapete  en  el  VII  Congreso  de  la Internacional Comunista con una concepción instrumental —la del Frente Popular— de la democracia. Leer más…