«Capital y competencia en Marx: la lógica de la transformación»: Mario L. Robles Báez
Introduccion. Presentacion del problema
En años recientes, las teorias clásica y marxista de la dinámica de la competencia han sido intensamente estudiadas, en particular, sobre la convergencia o no convergencia, en el largo plazo, de los precios de mercado y de las tasas diferenciales de ganancia en precios de producci6n (o precios naturales) y en una tasa uniforme de ganancia entre diversos ramos industriales. Las conclusiones de los estudios al respecto han sido de tres tipos: 1. El proceso dinámico de la competencia produce que la economía tienda a una situaci6n de «equilibrio», a la que corresponde un conjunto de precios específicos, precios de producci6n, y una tasa uniforme de ganancia (Duménil y Lèvy, 1983, 1987); 2. El análisis de este proceso para ciertos casos específicos tiene como resultado la desaprobación de la hipótesis de la formación de una tasa uniforme de ganancia y de la estabilidad de los precios de producción (Nikaido, 1977, 1983; Steedman, 1984; Franke, 1984; Boggio, 1984); y 3. El proceso dinámico de la competencia es visto como un proceso cíclico donde los precios de mercado y las tasas diferenciales de ganancia oscilan alrededor de los precios de producci6n y de una tasa uniforme de ganancia, respectivamente, sin que necesariamente converjan en ellos. En este sentido, «el proceso de ajuste no seria ni asintóticamente estable ni inestable, sino que los precios (y las tasas de ganancia de mercado) serian forzados a fluctuar alrededor de 10s centros de gravedad.» (Flaschel y Semmler, 1985, 9; Semmler, 1984).
Estas tres interpretaciones del movimiento general de la competencia tienen como supuesto fundamental común que existen centros de gravedad o centros reguladores de los precios y las tasas de ganancia de mercado que dependen de las condiciones de la producci6n y reproducción en el largo plazo y que regulan los fenómenos del mercado. Sin embargo, cada una de estas interpretaciones considera de manera diferente la existencia misma de la tasa uniforme de ganancia y de los precios de producci6n en cuanto tales centros de gravedad:
En el primer caso, éstos son concebidos como resultado de los efectos de largo plazo de la competencia de los capitales industriales. En este sentido, son considerados como si sólo llegasen a existir en un momento dado en el largo plazo, por lo que nunca existen antes de ese momento.
En el segundo caso, ademas de compartir la concepción anterior, existe la posibilidad de que, para ciertas condiciones tecnológicas particulares de la estructura productiva, aquéllos nunca lleguen a existir. En realidad, para las dos interpretaciones anteriores, la tasa uniforme de ganancia y los precios de producci6n no existen como centros de gravedad puesto que no los consideran como una fuerza centrípeta realmente existente en todo momento de la reproducci6n del capital.
En todo caso, lo único que consideran que existen como centros de regulación son las condiciones de producción y de reproducción del capital.
Sólo en el tercer caso, aparecen como centros de gravedad que regulan la competencia. Sin embargo, como su determinaci6n no es explicada claramente debido a que no se responde al porqué y al cómo emerge una tasa uniforme de ganancia en la economía, su existencia en cuanto tales centros aparece como resultado, o bien, de considerar a la tasa uniforme de ganancia como un axioma, o bien, de un promedio estadístico de las fluctuaciones de las tasas diferenciales de ganancia y de los precios de mercado en el largo plazo.
En realidad, el problema del porqué y del cómo emerge una tasa uniforme de ganancia es y ha sido uno de los más difíciles de la economía política y que no ha sido resuelto a la fecha.
Capital y competencia en Marx, la lógica de la transformación
























